La menopausia es un periodo que se caracteriza por el cese de la actividad ovárica. Esta etapa ocurre cerca de los 50 años de edad y causa algunos desequilibrios en la salud conocidos como “trastornos de la menopausia”. En este periodo las mujeres experimentan algunos síntomas como: falta de concentración, sofocación, cefaleas, depresión, sudoración, y, por supuesto, la extinción del periodo menstrual.
La homeopatía, como una ciencia al servicio integral del paciente, ofrece tratamientos preventivos y curativos con medicamentos naturales, sin efectos secundarios nocivos. Problemas comunes en la tercera edad como: enfermedad de Alzheimer, artritis, hipertensión, osteoporosis, complicaciones del corazón, entre otras afecciones, pueden ser tratadas mediante remedios homeopáticos, a costos asequibles para los pacientes.
Actualmente, la homeopatía ofrece una gama amplia de medicamentos no invasivos y que tampoco generan dependencia. Para obtener el tratamiento más adecuado, de acuerdo a la historia clínica del paciente, es preciso acudir donde el médico homeópata de su confianza, quien guiará al adulto mayor en el camino de una vida plena.
De acuerdo con el homeópata español Andrés Guerrero Serrano, atender a personas de la tercera edad involucra paciencia y vocación, por supuesto esfuerzo, sin embargo, como anota Guerrero «la felicidad del terapeuta es mayor cuando, tras este esfuerzo inaudito y casi extenuante, el paciente recupera la vitalidad. Si la sonrisa de un niño curado es el mejor pago de un terapeuta, no lo es menos el cariño y el agradecimiento de un anciano que recupera sus ganas de vivir en plenitud. No hay nada que pueda compararse a esto.”
Parte de la información de este artículo es adaptada de ABC Homeopatía.
